3/11/07

La Inteligencia alemana investiga los vínculos de Rabei Osman 'Mohamed El Egipcio' con otra célula yihadista autónoma

Rabei Osman podría haber "incubado" células yihadistas autónomas en Saarbrücken (Alemania), Madrid y Milán

03-11-07 - Nati Villanueva (ABC)

Rabei Osman «El Egipcio», absuelto como inductor del 11-M por el Tribunal que juzgó los atentados de Madrid, lleva siendo investigado desde 2002 por los servicios secretos alemanes (BKA), que sospechan que, tras su paso por aquel país, en 2000, entabló relaciones con una célula terrorista cuya infraestructura habría dado cobijo a condenados por los atentados de los trenes de Madrid como Basel Ghalyoun, Fouad El Morabit o Abdelmajid Bouchar.

De esta forma, Rabei Osman «El Egipcio» pudo servir de enlace entre algunos de los terroristas de Madrid y los radicales instalados en Alemania, cuando los primeros «visitaron» o se ocultaron (como el huido Bouchar) en aquel país.

Alemania sería así el cuarto territorio en el que Rabei Osman ha dejado su huella, además de Francia; Italia, donde ha sido condenado por pertenencia a organización terrorista; y España, donde también está constatada su integración en organización terrorista aunque no se le haya podido condenar otra vez por este delito, pues lo contrario habría vulnerado -apunta el Tribunal- el principio «non bis in idem».

No obstante, y según ha podido saber ABC, varias acusaciones recurrirán esta absolución e intentarán demostrar ante el Tribunal Supremo que al no ser Al Qaida una estructura jerarquizada, sino un paraguas ideológico bajo el que se integran células independientes, cada una de ellas tiene un carácter autónomo y es posible pertenecer a varias a la vez.

La investigación de los servicios de inteligencia alemanes se remonta a cinco años atrás, con la llegada de los condenados Basel Ghalyoun y Fouad El Morabit a la ciudad germana de Saarbrücken el verano de 2002. Por entonces Rabei Osman ya no estaba allí, sino en España, destino al que se había desplazado justo un año antes, en septiembre de 2001.

Fueron precisamente las relaciones de Fouad El Morabit y Basel Ghalyoun con Abdelhajlid Errabich (con el que convivió Fouad) y con Adnan Waki (con quien se alojó Basel) las que llevaron a la Inteligencia alemana a tirar del hilo y conectar a los ahora condenados por pertenencia a organización terrorista con aquel individuo («El Egipcio») que las autoridades habían detenido por residir ilegalmente en el país, donde por aquellas fechas también se encontraba Mohamed Atta, suicida del 11-S.

En las investigaciones de la Policía española Fouad El Morabit jugó un papel importante, hasta el punto de que a través de él se llegó hasta Rabei Osman. Cuando se investigaron las llamadas telefónicas de Fouad tras su detención después de los atentados de Madrid, la Policía se percató de que entre ellas figuraba un número de teléfono de Italia. Se preguntó por este extremo a los agentes italianos, que si bien en un primer momento respondieron que aquel número no correspondía a ningún usuario, dos días después señalaron como titular a Rabei.

La comunicación también fue importante a la inversa, pues Fouad es el único condenado al que se refirió de forma explícita «El Egipcio» en una de las conversaciones interceptadas por la policía italiana en Milán. Fue el 24 de mayo de 2004. Su interlocutor era el condenado por pertenencia al GICM Mourad Chabarou. Rabei Osman le hace saber que todos sus amigos de Madrid han muerto, «también Serhane («El Tunecino») y Fouad», dijo, pensando que el segundo también se suicidó en Leganés, pues no logró contactar con él.

Rabei salió de Egipto por primera vez en junio de 1999 para «mejorar» su situación económica, según declaró él mismo en el juicio. Se dirigió a Polonia desde Alejandría en un vuelo con escala en Frankfurt, capital donde destruyó su pasaporte para que no le devolvieran a Egipto. Fue detenido como ilegal e ingresó en un centro de acogida hasta septiembre de 2000. A partir de ese momento se le pierde la pista hasta que aparece en España en septiembre de 2001. Hasta entonces Rabei sólo tenía en su poder un «duldung» (un documento que acredita la condición de extranjero en trámite de expulsión), con lo que no se sabe cómo abandonó el territorio asignado (Alemania).

Durante la primera etapa de su estancia en Madrid (en la que nunca dejó de tener contacto con los islamistas radicales afincados en territorio germano), Rabei Osman vivió como un vagabundo, vendiendo citas coránicas en las puertas de las mezquitas. En una de ellas conoció a Fouad y al resto de condenados de Virgen del Coro. Con uno de ellos, Basel Gahlyoun, y con Zeimi Pardo, volvió una vez a Alemania.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Esto de las celulas durmientes recuerda a "Telefono rojo, volamos hacia moscu" ó tambien a "La invasion de los ultracuerpos" durmientes.

Son peliculas narradas desde el poder, ya muy antiguas, pero siempre hay mucho ignorante dispuesto a creerselas, lamentablemente..