16-12-10 - EFE
La Audiencia Nacional juzgará entre el 24 y el 30 de marzo a cuatro presuntos terroristas islamistas acusados de ayudar a huir de España a varios de los autores de los atentados del 11-M y para los que la Fiscalía pide entre 13 y 8 años de cárcel por integración o colaboración con organización terrorista.
Así lo ha acordado la sección cuarta de la Sala de lo Penal en un auto en el que fija los días 24, 25, 28, 29 y 30 de marzo para la celebración de la vista oral y reclama a Instituciones Penitenciarias que, de cara a esas fechas, los acusados (presos por otras causas) estén a disposición del tribunal con un mes de antelación "en un centro penitenciario de esta provincia (Madrid) o inmediaciones".
El fiscal pide diez años de cárcel para Zohair Khadiri, Djilali Boussiri y Nasreinne Ben Laidne por un delito de integración terrorista, mientras que para Abdelkrim Lebchina solicita ocho años de prisión por colaboración con organización terrorista.
Para Ben Laidne pide además tres años de prisión por el delito de tenencia de útiles para falsificación, con lo que en total se enfrenta a una petición de trece años.
En su escrito de conclusiones, la Fiscalía asegura que los procesados ayudaron económicamente y dieron alojamiento a los huidos Said Berraj (en paradero desconocido), Daoud Ouhnane, Othman El Mouib y Mohamed Afalah (supuestamente muertos en atentados suicidas en Irak), quienes "estuvieron directamente implicados" en la colocación de los artefactos explosivos utilizados el 11-M.
Otros dos de los presuntos terroristas que huyeron tras la masacre, Abdelilah Hriz y Mohamed Belhadj, y que recibieron ayuda de los acusados, ya han sido enjuiciados en Marruecos y condenados a 20 y 11 años de prisión, respectivamente, por esos hechos.
El fiscal relata cómo tras los atentados del 11-M, los autores de la masacre huyeron de España pasando por el inmueble conocido como "Alkalaa" (el refugio), situado en el número 20 de la calle San Francesc de Santa Coloma de Gramanet (Barcelona), centro neurálgico de la denominada "red Tigris", donde recibían financiación y documentación para la huida.
17/12/10
La Audiencia Nacional juzgará a 4 islamistas que presuntamente ayudaron a huir a implicados en el 11-M
11/12/10
Aznar pidió a EEUU que apoyara la versión de la autoría de ETA el 11-M
11-12-10 - EFE
El Gobierno de José María Aznar pidió al de EEUU que hiciera hincapié en que estaba seguro de la autoría de ETA en los atentados del 11-M, según un cable remitido por la Embajada estadounidense en Madrid el mismo día de la matanza. El cable llevaba el título 'Masacre de ETA en Madrid tres días antes de las elecciones' y en el mismo, entre otras consideraciones, se afirmaba que "Otegi atribuyó el ataque a los extremistas islámicos".
"Contactos en la oficina del presidente nos han llamado para que hagamos hincapié en que el Gobierno español está seguro de que el autor es ETA, como Acebes (entonces ministro del Interior) ha declarado enfáticamente. Nos piden que el Gobierno de EEUU apoye esta declaración y no exprese ninguna duda en sus comentarios públicos acerca de la autoría", según se hace eco el diario El país.
El 15 de marzo, otro cable advertía de que la probabilidad de vínculos de Al Qaeda con el ataque se incrementaban: "Mientras las autoridades no descartan completamente la responsabilidad de ETA, o un papel de ETA en la coordinación con un grupo terrorista islámico, la principal línea de investigación es Al Qaeda".
EEUU se impacientó ante la obsesión de Aznar por atribuir el 11-M a ETA
9-12-10 - C.G. (El Plural)
La versión dada por el Gobierno de Aznar sobre una autoría de ETA del trágico atentado del 11-M, y su empeño en convencer a la opinión pública, fue vista con escepticismo por la diplomacia de Estados Unidos, según cables filtrados por Wikileaks, en los que, además, se menciona al diario El Mundo como el paladín mediático de esa teoría.
Los cables enviados por la Embajada estadounidense en Madrid, desde el mismo día 11 de marzo de 2004 dieron cuenta del empecinamiento del Gobierno de José María Aznar en achacar a ETA el atentado, de acuerdo con los documentos filtrados por Wikileaks y publicados este jueves por El País.
Una obsesión con ETA
Algunos de los mensajes secretos enviados los días posteriores a la matanza de Atocha y hasta el final del mandato de George Bush evidencian la impaciencia de Estados Unidos por el desenfoque de los objetivos de seguridad de las autoridades españolas. La diplomacia estadounidense lo consideró una obsesión por ETA, a la que aluden como "terrorismo interior", y recriminó a la Administración Aznar que no pusiera el foco en el fundamentalismo islámico, en la “guerra global contra el terror", como la había calificado Bush.
La teoría de la conspiración del PP y El Mundo
Un cable enviado por la Embajada estadounidense a Washington, el 20 de octubre de 2006, refiere que "a pesar de que hace ya más de dos años y medio de los atentados contra los trenes de Madrid sucedidos el 11 de marzo de 2004, y de la prácticamente universal aceptación por la opinión española y por los expertos en terrorismo de que fueron perpetrados por simpatizantes de Al Qaeda un segmento del Partido Popular, en la oposición, y el periódico El Mundo, continúan acusando al Partido Socialista de conspiración y encubrimiento, y reclaman que el grupo terrorista vasco ETA tiene algo que ver con los ataques del 11 de marzo".