Mohamed Oulad Achka fue la persona que leyó el comunicado del primer vídeo reivindicativo

Vídeo de la reivindicación en YouTube

13-11-06 - Jorge A. Rodríguez

La policía ha identificado al hombre que lee un texto en el primer vídeo de reivindicación del 11-M, el depositado dos días después de la matanza en los trenes de Madrid en una papelera cercana a la mezquita de la M-30 de Madrid. Una testigo protegida, vinculada a los suicidas de Leganés, asegura, sin género de dudas, que el lector encapuchado es Mohamed Oulad Achka. Sin embargo, el juez Juan del Olmo ha rechazado admitir como firme esa identificación hasta que, al menos, otro testigo más ratifique dicho señalamiento.

La identificación del lector del comunicado, lograda dos años y medio después del atentado, era una asignatura pendiente de los investigadores del 11-M. El vídeo fue hallado el 13 de marzo de 2004 en una papelera cercana a la mezquita central de Madrid. Su localización fue comunicada a las 19.38 por un anónimo que hablaba español con acento árabe, que telefoneó a Telemadrid.

El vídeo mostraba a un hombre vestido de blanco, una gorra azul, gafas de sol y la cara cubierta que portaba entre sus brazos una ametralladora Sterling (idéntica a la hallada en los escombros del piso de los suicidas de Leganés). La cinta, metida dentro de un guante, era una cinta mini DV Panasonic, de las mismas características que la comprada el 8 de marzo por dos hombres que supuestamente hablaban en búlgaro en el mismo bazar propiedad de dos ciudadanos indios donde fueron comprados los teléfonos utilizados en las bombas de los trenes.

Las primeras investigaciones llevaron a pensar que el lector del comunicado era Youssef Belhadj, ya que éste era conocido como Abu Dujaha. El lector del comunicado de amenaza decía ser "el portavoz del ala militar de Al Qaeda en Europa, Abu Dujan Al-Afgani. Sin embargo, las pruebas periciales efectuadas tras su detención y entrega a España determinaron que no había sido él.

El amigo de El Chino

Las pesquisas posteriores han permitido determinar que quien se hacía "responsable del ataque acontecido en Madrid", por el apoyo del Gobierno de España a las guerras de Afganistán e Irak, era el tetuaní Mohamed Oulad Achka, íntimo amigo de Jamal Ahmidan, El Chino, también de Tetuán. Ambos murieron en la explosión de Leganés que acabó con la vida del núcleo central del comando del 11-M, en palabras del entonces ministro del Interior, Ángel Acebes.

La Comisaría General de Información elaboró tras el pasado verano un informe en el que una testigo protegida identificaba sin género de dudas a Mohamed Oulad como la persona que leía el comunicado, en árabe clasico, con la reivindicación. Sin embargo, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 6, Juan del Olmo, rechazó dicha identificación al considerar que una sola persona no era suficiente para darla por cierta.

Los agentes, hasta el momento, no han podido aportar nuevas pruebas para avalar la identificación. El cajetín en el que estaba la cinta lucía la anotación manuscrita "muy urgente". La letra fue sometida a exámenes grafológicos y enviada al juzgado el 1 de diciembre de 2005. "No se ha podido determinar la autoría de la grafía mencionada", decía el informe.

También fue sometido a análisis el guante de lana de color azul en cuyo interior estaba la cinta depositada en la papelera próxima a la mezquita. El laboratorio de Biología-ADN de la Comisaría General de Policía Científica logró extraer una huella con valor identificativo, pero tuvo que ser archivada como anónima. También se logró extraer ADN "sin obtener resultados concluyentes".

El lector tenía a su espalda un estandarte de color verde con el lema en árabe "No hay más Dios que Alá y Mahoma es su profeta". Ese estandarte fue localizado en los escombros del piso de los suicidas de Leganés y es el mismo que aparece a la espalda del segundo vídeo de reivindicación del atentado, localizado en los escombros. En él, El Chino lee un comunicado de reivindicación y amenaza "escoltado por dos enmascarados con pasamontañas, al parecer los hermanos [Rachid y Mohamed] Oulad", según el escrito de calificación del fiscal.

Los dos hermanos eran los principales colaboradores de Jamal Ahmidan y participaron en el transporte de explosivos desde Asturias. El ADN de Mohamed Oulad fue localizado el mismo 11-M en unas ropas dejadas por unos desconocidos junto a la estación de trenes de Vicálvaro, de la misma línea de los convoyes atacados, en el coche utilizado para la colocación de una bomba en el AVE de Madrid a Sevilla, el 2 de abril de 2004.


Tres borradores, tres escritos y tres vídeos islamistas sobre la autoría

Los atentados del 11-M han sido reivindicados públicamente a través de tres escritos enviados a la prensa, dos a diarios londinenses y otra al español Abc, tres vídeos de reivindicación (el de la M-30 y dos hallados en los escombros del piso de los suicidas de Leganés) y tres borradores, elaborados de su puño y letra por Jamal Ahmidan. En todos los casos la autoría se asume por parte de Al Qaeda o grupos vinculados o inspirados en la red de Osama Bin Laden. En ningún momento aparece ni someramente ETA, que lo que sí hizo fue llamar el 12 de marzo de 2004 a los diarios Gara y a la televisión autonómica vasca para negar cualquier vinculación con los atentados.

Las reivindicaciones halladas en España, atribuidas a Ahmidan (los dos vídeos del desescombro), Serhane Ben Abdelmajid, El Tunecino (el fax remitido a Abc) y la de la M-30 fueron completadas por el mismo Bin Laden, el 15 de abril de 2004. El líder de Al Qaeda reivindica implícitamente los atentados de Madrid, que vincula con los del 11-S y que califica como respuesta a los conflictos de Palestina, Afganistán e Irak. "Os quiero comunicar que la mercancía se ha vuelto contra vosotros en el 11 de septiembre y el 11 de marzo", manifestó Bin Laden en el vídeo, autentificado por los servicios secretos de Estados Unidos.