10-11-06 - La Nueva España
El delegado del Gobierno en Asturias, Antonio Trevín, dijo ayer que el gobierno del PP conocía desde 2001 la incautación de dinamita goma-2 en la Operación Pípol llevada a cabo en el Principado, lo que "debería haberles llevado a tomar decisiones".
Así lo comentó en referencia a los últimos datos del sumario por los atentados del 11 de marzo del 2004, en los que se habría utilizado goma 2 eco, el mismo tipo de la dinamita incautada en la Operación Pípol llevada a cabo en 2001 en Asturias, y al ser preguntado por las medidas que se tomaron y el control de explosivos que se efectuó.
Antonio Trevín precisó que "en este momento, la Operación Pípol está en fase de juicio" por lo que destacó que se debe tener "total respeto a las actuaciones judiciales y al tribunal" y mostró su "convencimiento de que el Estado de Derecho y las instituciones del ámbito judicial obrarán en consecuencia con los criterios legales correspondientes". Recordó que "la operación Pípol tuvo lugar en 2001, por tanto con el Gobierno del PP en el Estado".
Trevín añadió que "en un momento en el que todavía no estaba culminada la operación se pidieron detalles de la misma por parte del entonces secretario de Estado de Seguridad a los máximos responsables policiales en Asturias, cuando todavía no tenían información sobre la operación que se desarrollaba ni los detalles de la misma".
Por ello, agregó, "los máximos responsables de la Policía de Asturias tuvieron que solicitar esa información a las personas que realizaban la operación, y que transmitieron al secretario de Estado de Seguridad".
Así, "tanto los aspectos del tráfico de estupefacientes como el descubrimiento de los explosivos en dicha operación lo conocía el entonces secretario de Estado de Seguridad y hay que suponer que el Ministro del Interior de entonces", precisó.
Insistió en que "conocieron particularmente detalles y circunstancias tanto del alijo de la droga como del descubrimiento de explosivos que venían del tráfico irregular". Trevín insistió en que ninguno de los responsables populares adoptó resolución alguna. "A la luz de la historia posterior hay información para hacerse una composición de lugar de las medidas que debieron tomar", concluyó el Delegado del Gobierno.
La Comisaría de Gijón filtró a Interior el hallazgo de la dinamita dos horás después de su intervención
11-11-06 - El Comercio
La Comisaría de Gijón comunicó al Ministerio de Interior apenas dos horas después del registro que el 25 de julio de 2001 se hizo en el garaje que supuestamente compartían Trashorras, Toro y 'Nayo', que entre los artículos aprehendidos aparecían, además de drogas, 16 cartuchos de goma 2 eco y 94 detonadores eléctricos. De ello no dio parte al entonces jefe de Policía en Asturias, Juan Carretero, según pudo saber EL COMERCIO.
Esa es la razón por la que el jefe Superior de Policía en aquel año no sabía de qué le hablaban cuando recibió una llamada de la Secretaría de Estado de Seguridad, que entones dirigía Pedro Morenés, con Mariano Rajoy al frente del Ministerio. La filtración, procedente de la Comisaría de Gijón, cuyo responsable era José Villar del Saz, puso en alerta a los responsables de las Fuerzas de Seguridad del Estado, que, sin embargo, no recibieron orden de tomar medida extraordinaria alguna para comprobar si en Asturias trabajaba una trama de tráfico de explosivos.
El actual delegado del Gobierno, Antonio Trevín, desveló el jueves pasado que, bajo el mandato de José María Aznar, Interior supo del hallazgo de esa dinamita e, incluso, instó al PP a explicar qué medidas impulsó para frenar la venta de dinamita.
Se da la circunstancia de que cuando la Comisaría de Gijón facilita esos datos a Interior el vigilante de la sala de fiestas Horóscopo Francisco Javier Lavandera ya había denunciado que Antonio Toro le había mostrado el maletero de su coche lleno de dinamita y detonadores. Una denuncia de la que, según el ex testigo protegido del 11-M, «se rieron y me dijeron que se trataría de un minero».
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