La policía planteó a Acebes serias dudas sobre ETA antes de la manifestación del 12-M

Nueva confirmación de que se siguió la definitiva pista islámica en la mañana del 13-M pese a que Acebes lo negó

7-07-04 - EFE / Cadena SER

El ex comisario general de Información Jesús de la Morena aseguró hoy que en la tarde del viernes 12 de marzo comunicó al entonces ministro del Interior, Angel Acebes, que había indicios que "no encajaban" con ETA y que "la vía integrista hay que empezar a contemplarla con bastante seriedad".

El ex comisario general de información también ha asegurado que el viernes 12 por la tarde, antes de las manifestaciones contra el atentado del 11-M, comentó sus dudas sobre la autoría de ETA en una reunión en la que estaba presente Ángel Acebes.

En esa reunión en la que estaban presentes, entre otros, el ministro Acebes y el secretario de Estado de Seguridad, Ignacio Astarloa, comparte con ellos que hay "algún indicio, ninguno objetivo que nos permita decantarnos" que les obliga "a contemplar con bastante seriedad la vía integrista". Horas después, millones de personas se manifestaron en toda España en contra de los atentados.

De la Morena indicó, no obstante, que el primer "indicio objetivo" de la autoría islamista lo tuvo "entre las doce y las doce y cuarto" de la mañana del día siguiente, cuando conoció el nombre del comprador de las tarjetas telefónicas utilizadas en los atentados. Es decir, a las doce del mediodía del día 13 de Marzo, la policía ya estaba sobre el rastro de los terroristas islámicos. Sin embargo, a la una de la tarde, el portavoz del Gobierno Eduardo Zaplana seguía insitiendo que ETA era la principal sospechosa.


SABÍA DE LAS DETENCIONES

A preguntas del diputado Jaime Ignacio del Burgo (PP), que incidía en las declaraciones anteriores de Mariano Rayón acerca del momento en que se conoce la pista definitiva que conduce a los islamistas, Jesús de la Morena reconoce que informó el 13-M por la mañana al secretario de Estado de Seguridad sobre las primeras detenciones de terroristas "supuestamente árabes".

Jaime Ignacio del Burgo le preguntó entonces si consideraba normal que Acebes no comentara nada sobre esta operación en la rueda de prensa que posteriormente ofreció hacia las 15.00 horas del día 13. Sin embargo, del Burgo pasó por alto el hecho de que Acebes aseguró en esa rueda de prensa que ningún mando policial le había dicho que la investigación tenía como línea preferente a Al Qaeda.


PISTA FALSA: TITADYNE

Según explicó De la Morena, el subdirector Operativo recibió a las 12.00 horas del día 11 una llamada telefónica en presencia de entre ocho y diez responsables policiales en la que se le informó de que los atentados en los trenes habían sido perpetrados con dinamita de esa marca comercial.

"Si sólo se hubiera hablado de dinamita, la afirmación categórica de ETA no se habría producido", afirmó De la Morena.
A preguntas del diputado del PP Jaime Ignacio del Burgo, el ex comisario de Información dijo no saber quién llamó a Díaz Pintado, aunque presumió que se trataba del que en ese momento era el máximo responsable de la Comisaría General de Seguridad Ciudadana, Santiago Cuadro, del que dependían los TEDAX.
El compareciente expuso que, antes de conocer ese dato, pensaba que ETA tendría bien que haber dado un "salto cualitativo" para haber cometido ese atentado, como la llegada de un nuevo dirigente, o haberse producido otra "degeneración operativa" de la banda con un fallo similar al que ocurrió con las mochilas-bomba colocadas en la Navidad de 2003 en el intercity Irún-Madrid.

De la Morena manifestó que tras el hallazgo de los detonadores y el cartucho de dinamita en la furgoneta localizada en Alcalá de Henares se vislumbró la posibilidad de que el explosivo no fuera Titadyne, lo que unido a la casete con versos coránicos que se encontró en el mismo vehículo permitió que en la misma tarde del día 11 se abriera una segunda vía de investigación.

A las 5.20 horas de la mañana del viernes 12, el ex comisario fue informado de que el explosivo era Goma 2 ECO, y ese mismo día se realizaron las primeras gestiones para averiguar la procedencia de la tarjeta telefónica encontrada en la única mochila que no llegó a estallar.
"Después del error del Titadyne, queríamos ajustarlo todo al máximo", añadió De la Morena, quien señaló que entre sus subordinados "había partidarios de una tesis y partidarios de otra", e incluso quienes defendían la teoría de la colaboración entre ETA y grupos islamistas, y que esa situación se mantuvo hasta la madrugada del sábado 13.